Conflicto de interés entre la sociedad, el gobierno, los derechos y las obligaciones individuales.
Lo que se torna necesario y de carácter urgente es analizar que todos compartimos un solo contexto social, pero diferentes perspectivas educativas, económicas y sanitarias, así pues, es como comienza el debate y la confrontación pública y privada sobre quién tiene la razón acerca de la realidad que compartimos.
Hoy en día todos nos enfrentamos a la incertidumbre sanitaria, económica y social de nuestros municipios o ciudades y es correcto y aplaudible tomar posturas acerca de cómo percibes TU REALIDAD ya sea desde la perspectiva positiva o la negativa.
Lo que se torna necesario y de carácter urgente es analizar que todos compartimos un solo contexto social, pero diferentes perspectivas educativas, económicas y sanitarias, así pues, es como comienza el debate y la confrontación pública y privada sobre quién tiene la razón acerca de la realidad que compartimos.
Muchos se quejan hoy en día de la miseria, el hambre, la falta de trabajo y oportunidades, alzan la voz contra el gobierno y exigen cuidados y mas oportunidades, y todo es válido porque es la realidad que ellos viven a diario.
Otros tantos de los ciudadanos parecen estar conformes con la situación actual y aunque toda actividad económica está suspendida para no afectarles y defiende lo que para ellos es su realidad y también es válida ya que de una manera u otra alcanzaron un nivel de vida equilibrado con ahorros y previsiones que hoy en día los ayudan a seguir las indicaciones gubernamentales por lo que bajo su contexto son los otros ciudadanos lo que no entienden la gravedad de la situación.
El punto medular de un fenómeno social, sanitario o económico radica en que todos los ciudadanos y el gobierno toman una postura política o pública acerca de cómo "según" su propia realidad deberían de hacerse las cosas sin tomar en cuenta tanto los derechos como las obligaciones de una sociedad dividida.
El gobierno como regulador está obligado a prestar servicios públicos y recursos jurídicos para defender al más necesitado pero también tiene el derecho de seguir cobrando estos mismos servicios a toda la sociedad en general sin importar si son ricos o pobres, por lo mismo se encuentra en una disyuntiva, ayuda a su base electoral utilizando lagunas legales para ayudar a su pueblo o cumple con las funciones propias que emanan de la Constitución política del estado donde se mencionan específicamente sus funciones, atribuciones y deberes con todo el país.
Entonces he aquí las grandes preguntas
¿Se puede gobernar un estado sin afectar los intereses de uno o más sectores?
¿Es posible llegar aún consenso social por parte de la ciudadanía en general para que en conjunto con el estado se logre el tan ansiado bienestar social y una realidad colectiva equitativa?
Y Por ultimo pero para mi forma de observar este fenómeno es medular:
¿Podrá el ciudadano pobre o rico de forma individual hacer una retrospectiva acerca del porqué vive él y su familia en condiciones precarias o en contraste ostentosa, y comprender que la solución no está en la confrontación, queja y divisionismo de todos contra todos, si no por el contrario, se encuentra en ese tan lejano e inalcanzable punto de equilibrio donde todos trabajemos sin polemizar, dividir o criticar en su conjunto a un individuo, familia, sociedad, gobierno, economía o educación?
Comentarios
Publicar un comentario